Un nuevo estudio publicado en el British Journal of Sports Medicine reveló que tan solo 22 minutos diarios de ejercicio de moderado a vigoroso pueden disminuir el riesgo de mortalidad asociado a un estilo de vida sedentario. Los efectos beneficiosos del ejercicio están directamente relacionados con la dosis, lo que significa que cuanto más se ejercite, mayor será la reducción del riesgo de muerte prematura.
Con un mínimo de actividad física se puede prevenir la muerte por sedentarismo
El Dr. Edvard H. Sagelv, primer autor del estudio y profesor de la Universidad Ártica de Noruega en Tromso, explica que si bien existe cierta controversia en el campo de investigación sobre qué tan peligroso es el tiempo sedentario, comparado con la falta de actividad física, este tiempo no es tan perjudicial. En consecuencia, anima a seguir esta recomendación.
El estudio, realizado con una muestra de 11.989 personas, arroja como resultado que 22 minutos diarios de actividad física, ya sea en una sola sesión o divididos a lo largo del día, pueden ser suficientes para reducir el riesgo de morir prematuramente debido a un estilo de vida sedentario. Además, se destaca que la práctica regular de ejercicio también tiene beneficios para la salud mental, como la reducción de la ansiedad y la depresión, así como una mejora en la calidad del sueño.
Los beneficios a nivel mental que tiene la actividad física
Los datos revelan que el 42,7% de los españoles no practicaron deporte en 2022, según la última Encuesta de Hábitos Deportivos del Gobierno. Las mujeres fueron las que más admitieron no haber realizado actividad física durante el año, con un 48,2%, mientras que en los hombres el porcentaje fue menor, con un 36,9%.
Por otra parte, la Encuesta Europea de Salud muestra que el 36,4% de los españoles dedican su tiempo libre a actividades sedentarias, cifra que asciende al 47% según el Eurobarómetro de la Unión Europea.
Además, se destaca que la mayoría de la población pasa la mayor parte de su tiempo laboral sentada (37,1%), mientras que otro grupo importante permanece de pie sin realizar grandes desplazamientos (38,8%). Solo un 21,4% de las personas realizan desplazamientos frecuentes o tareas que requieren un esfuerzo físico considerable.
Para llevar a cabo este estudio, los investigadores siguieron a los participantes de 11.989 personas que formaron parte de distintos estudios basados en rastreadores de actividad física, como el Estudio Noruego Tromso, la Iniciativa Sueca de Envejecimiento Saludable, la Encuesta Nacional de Actividad Física de Noruega y la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición de EE. UU. Todos los participantes tenían al menos 50 años de edad y proporcionaron información sobre su peso, altura, género, nivel educativo, consumo de alcohol, tabaquismo y antecedentes previos de cáncer, enfermedad cardiovascular o diabetes.
Con estos resultados, se resalta la importancia de incorporar un mínimo de actividad física diaria para contrarrestar los efectos negativos de la vida sedentaria. Tan solo 22 minutos al día pueden marcar la diferencia en la salud y prolongar la esperanza de vida.
