Ana de nadie es una producción del Canal RCN que muestra historias de vida que les suceden diariamente a miles de mujeres alrededor del mundo. La cotidianidad de los sucesos que en la telenovela se relatan, identifica a muchas televidentes. Genoveva pasa por una compleja situación, pues recientemente le dictaminaron cáncer.
Benjamín gana terreno con Genoveva, aunque la mujer aún desea tener espacio para sobrellevar la enfermedad
A partir de ese mismo instante, el esposo de esta mujer, Benjamín Lemus (Lucho Velasco), se propuso firmemente a acompañar al amor de su vida hasta las últimas consecuencias, pero recalcó que iba a luchar por levantar sus brazos en el proceso y por estar cuando ella lo requiera.
Sin embargo, Genoveva (Adriana Romero) atraviesa por una situación de la que nunca se esperó. La llegada de esta enfermedad supone muchos cambios físicos que la tienen con la autoestima muy baja. Además, su organismo en diversas ocasiones no responde como ella desearía, así que comienza a sentir que es una carga para su marido.
Más específicamente, ella no desea que él la vea en esas condiciones.
En el capítulo de este martes 16 de mayo, los colombianos podrán apreciar el momento en el que Benjamín llega a la casa de Ana (Paola Turbay) a buscar a su esposa, ya que ella se está quedando con su mejor amiga. El hombre no arriba con las manos vacías y, por el contrario, visita el hogar de la arquitecta con alimentos para cenar junto a su mujer.
Genoveva hace una sentida petición a su esposo, Benjamín Lemus
Por insistencia de Ana, Genoveva atiende a su esposo, quien dice que, de ser necesario, todas las noches llegará con la cena para compartir con la mujer que ama.
Sin embargo, a la mujer eso no le parece buena idea, ya que le da vergüenza con su amiga que todas las noches esté llegando su esposo con comida. Pero Benjamín le responde que está de acuerdo con ella, por lo que le parece increíble que no puedan compartir en su propio hogar, bajo su propio comedor o en la cocina que les pertenece.
Como Genovena le dice que tiene vergüenza de cómo se ve físicamente y también de qué pueda pensar su esposo al tocarla, el contador de profesión le dice que ese no es inconveniente, ya que está dispuesto a quedarse en otra parte de la casa para respetarle su espacio.
La mujer le dice que por favor le de tiempo y espacio, hasta que vaya superando el proceso que implica lidiar con el cáncer.
Lo cierto es que Benjamín no está dispuesto a perder a su mujer. La ama, desea estar con ella en este tiempo de dificultad, pero es ella la que se muestra constantemente insegura e incapaz de amar a su esposo en esas condiciones.
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