La falta de apetito en los perros es un problema común que puede estar asociado a diversas causas. Según el informe "Papel social del alimento y patologías del comportamiento relacionadas con la alimentación en el perro", cuando estas mascotas experimentan fiebre, es normal que pierdan las ganas de comer como respuesta adaptativa. Sin embargo, esta situación también puede estar relacionada con otras enfermedades o trastornos.
El estrés es una de las posibles causas de la falta de apetito en los perros, loa cambios en la rutina, mudanzas o la adopción de otra mascota pueden generar estrés en el animal y afectar sus hábitos alimenticios. Además, la falta de paseos y la falta de cariño también pueden contribuir al estrés y a la ansiedad en los perros.
¿Por qué los perros pierden el apetito?
Otra posible causa de pérdida del apetito son los problemas estomacales, esto teniendo en cuenta que la indigestión puede dificultar la absorción de alimentos y llevar a que alimentarse les resulte bastante difícil. En casos más graves, puede estar relacionada con la presencia de parásitos intestinales, los cuales generan malestar general, vómitos, presencia de gusanos en las heces y sarpullido.
Las enfermedades respiratorias también pueden ser otro factor por el que los caninos no sientan la necesidad de comer, a esto hay que agregar que los estornudos, la alta segregación de mucosa y los ladridos obstruidos pueden indicar una infección que afecta su olfato y, por lo tanto, su capacidad para distinguir y disfrutar de los alimentos.
¿Cómo estimular el apetito en los perros?
Ante esta situación, es importante buscar formas de estimular el apetito y mejorar el estado de ánimo de los perros. Para ello, los expertos de Red Canina sugieren una serie de remedios caseros.
El primero es mantener al perro bien hidratado, al igual que los humanos. La falta de líquidos puede llevar a la deshidratación y empeorar los síntomas. Además, si el perro presenta problemas gastrointestinales, se recomienda no darle comida durante un día, pero nunca sin agua, con el fin de que su sistema digestivo pueda recuperarse. Después de ese periodo de ayuno, se puede empezar a alimentarlo con pollo y arroz hervidos, evitando la piel y los huesos de esta proteína
Otro consejo es modificar la dieta del perro para hacerla un poco más beneficiosa y que a él le resulte atractiva, para ello puede agregar trozos de carne o un poco de caldo a la comida, también es importante servir los alimentos en cuencos grandes y profundos en lugar de platos, pues esto puede lograr que su mascota quiera explorar y finalmente cumplir su objetivo que es su bienestar.
