La cleptomanía es un trastorno poco común pero grave que afecta a miles de personas en todo el mundo. Se caracteriza por la incapacidad de resistir el impulso de robar objetos, aunque carezcan de valor o no sean necesarios para quien padece este trastorno. A pesar de que la cleptomanía no es ampliamente conocida, es importante comprender sus síntomas, características y las opciones de tratamiento disponibles.
Síntomas de la cleptomanía
Según la información proporcionada por expertos en salud mental, la cleptomanía se manifiesta a través de una serie de síntomas reconocibles. Estos incluyen la incapacidad de resistir fuertes impulsos de robar artículos que no se necesitan, la sensación de tensión o ansiedad antes del robo, el placer o alivio durante el acto de robo y sentimientos de culpa o remordimiento después del mismo. Además, las personas que padecen cleptomanía experimentan la reaparición de los impulsos y la repetición del ciclo de robo.
Es importante destacar que las personas con cleptomanía no roban por beneficio personal, desafío, venganza o rebelión. El impulso de robar es tan fuerte que no pueden resistirlo. Por lo general, los episodios de cleptomanía suceden repentinamente, sin planificación ni la ayuda de otra persona. A menudo, los robos ocurren en lugares públicos, como tiendas, aunque también pueden implicar a amigos o conocidos.
Un aspecto particularmente sorprendente de la cleptomanía es que los artículos robados no tienen valor para quienes los roban. Además, estos suelen esconderse y no son utilizados en ningún momento. Pueden ser donados, regalados o incluso devueltos secretamente al lugar de donde fueron sustraídos. Los impulsos de robo pueden variar en intensidad y duración a lo largo del tiempo.
¿Cómo tratar a una persona cleptómana?
Muchas personas que padecen cleptomanía evitan buscar tratamiento debido al temor de ser arrestadas o tener problemas legales. Sin embargo, es crucial comprender que un proveedor de atención médica especializado en salud mental no denunciará los robos a las autoridades. Por lo tanto, si una persona tiene dificultades para controlar sus impulsos de robar, se recomienda buscar asesoramiento médico.
En cuanto a las causas de la cleptomanía, se desconocen con certeza. Algunas teorías sugieren que cambios en el cerebro y desequilibrios químicos, como niveles bajos de serotonina, podrían ser factores fundamentales. Asimismo, la liberación de dopamina durante los robos puede generar una sensación placentera que algunas personas buscan repetir. Un desequilibrio en el sistema opioide del cerebro también puede influir en la dificultad para resistir los impulsos.
En qué etapa de la vida puede aparecer la cleptomanía
La cleptomanía puede comenzar en la adolescencia o en la adultez temprana, aunque también puede aparecer más tarde en la vida. Se estima que dos tercios de las personas con cleptomanía son mujeres. Los factores de riesgo pueden incluir antecedentes familiares y la presencia de otros trastornos mentales, como la ansiedad, la depresión o los trastornos por abuso de sustancias.
Si no se trata, la cleptomanía puede tener graves consecuencias emocionales, familiares, laborales y legales. El sentimiento de culpa, vergüenza y odio hacia uno mismo es común entre las personas que padecen este trastorno. Además, existe el riesgo de ser arrestado y las complicaciones asociadas, como el abuso de sustancias o la presencia de otros trastornos de control de impulsos.
Esta nota fue realizada con la ayuda de Inteligencia Artificial.
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