La hija mayor de Ana (Paola Turbay) en Ana de nadie, Emma, está viviendo una situación muy parecida a la que pasó Violeta (Adriana Arango), mejor amiga de su mamá, cuando tenía 17 años, pues está pasando por un embarazo no deseado y ha escuchado consejos de muchas personas.
Uno de ellos es Alejandro, un compañero de trabajo que se involucró con ella físicamente, pero trataron de no llegar a una relación sentimental, pues sólo se querían como amigos.
Además, cabe aclarar que él no es el papá del bebé que espera Emma. El consejo de Alejandro se basó en que, si Emma está pensando en dar a luz a su bebé, pero darlo en adopción para no tener que criarlo, supiera que esto no es una mala idea y que los niños adoptados pueden tener grandes vidas como él.
Alejandro le reveló a Emma que Oriana y él son adoptados
Para darle más contexto de la situación, Alejandro le contó a Emma que Oriana, su actual pareja, también es adoptada, pero esto no le gustó para nada a la mujer, pues no quería que ese secreto lo supiera nadie cercano a Violeta.
En el capítulo de este martes 30 de mayo, Oriana le explica esto a Alejandro y le dice que Emma no se podía enterar porque podría contarle a Violeta y el hombre se molesta porque cree que no es más que una pataleta o una obsesión de parte de Oriana por quien fue su jefe.
Oriana le confiesa a su novio Alejandro que Violeta, su exfeje, es su mamá biológica
Como notó tanta presión de Alejandro y que no la estaba entendiendo, Oriana optó por decirle la verdad y contarle que la mamá biológica que encontró después de su búsqueda es Violeta y que está muy feliz de conocerla y hasta trabajar con ella, pero que no quiere molestarla contándole que es su hija porque considera que no tiene el derecho de hacerlo.
Además, le gustó conocerla porque se dio cuenta de que su adopción tomó sentido: Violeta no iba a ser una buena madre y, por el contrario, sus papás adoptivos le dieron una gran vida.
