El último obstáculo que vimos en Ana de nadie para el amor de Joaquín (Sebastián Carvajal) y Ana (Paola Turbay) tiene que ver con una oportunidad laboral que significa mucho para la carrera del periodista Cortés. Se trata de un trabajo con el que sueña desde que estaba en la universidad, pero que decidió no aceptar porque sintió que el amor por su novia Ana es más importante que este sueño.
Incluso, cuando decidió quedarse en Colombia para no separarse de Ana, también decidió comprar un anillo y pedirle matrimonio para asegurarse de que nunca la iba a perder y de que su amor es para toda la vida.
No obstante, Joaquín nunca le habló a Ana de esta oportunidad que tenía, pues no quería que ella hiciera parte de esta decisión tan importante para su vida.
Ana se entera del gran sacrificio que iba a hacer Joaquín por su amor
Sin embargo, la arquitecta se enteró de que Joaquín rechazó el trabajo de sus sueños por ella porque Teo, el hijo del periodista, llamó a su hija Florencia para que le ayudara a separar a su papá de la arquitecta y la joven se negó en ayudarlo en algo así porque entendió que su mamá es feliz con su novio.
Ahora bien, Ana decidió ir al apartamento de Joaquín para que Teo y Magdalena, la exesposa de Joaquín y madre de su hijo, le ayudaran a confirmar la oferta laboral e incluso pedir que el contrato se lo envíen a su correo para que, en medio de una cena romántica, él no tuviera más salida que firmar y aceptar.
Ana convence a Joaquín de que se vaya para España sin ella a cumplir sus sueños
Aunque Joaquín se negó bastante a separarse de la mujer que tanto ama, Ana le explicó que esto es por el bien de los dos, pues no puede permitir que, luego de años, él la culpe por no cumplir sus sueños, pues fue justamente eso lo que le pasó a ella misma con su exesposo y el papá de sus hijos, Horacio Valenzuela (Jorge Enrique Abello).
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