La respuesta biológica y psicológica que explica por qué a las personas les gusta asustarse ha sido analizada por expertos en Stanford Medicine. Según el Dr. Elias Aboujaoude, profesor clínico de psiquiatría y ciencias del comportamiento, la adrenalina, la dopamina y el cortisol son las sustancias químicas clave que influyen en la reacción ante el miedo.
¿Qué hace que el miedo sea tan placentero?
La compleja respuesta al miedo involucra neurotransmisores y hormonas que afectan a diferentes áreas del cerebro, desde la amígdala hasta el lóbulo frontal. Estas sustancias activan otras emociones, tanto desagradables como placenteras.
El cuerpo humano se ha adaptado para responder al miedo, preparándose para luchar o huir. Esto implica cambios fisiológicos, como la dilatación de las pupilas y el ensanchamiento de los bronquios. Además, se desvía sangre y glucosa hacia los órganos vitales y los músculos del esqueleto.
La liberación de adrenalina, cortisol y dopamina es una respuesta evolutiva cuando el ser humano se siente amenazado. La adrenalina aumenta el ritmo cardíaco, la presión arterial y la frecuencia respiratoria, generando una sensación de vigor y energía.
Por otro lado, el cortisol, conocido como la hormona del estrés, se libera para regular funciones corporales y puede aumentar en situaciones estresantes. Esta hormona puede ayudar a mantenerse alerta y obtener energía durante una emergencia.
La dopamina, un neurotransmisor asociado al bienestar, se vincula con el placer y la expectativa de una recompensa. Puede ser liberada con la superación de una amenaza o el logro de metas personales.
¿En qué momento el miedo puede ser placentero para el ser humano?
El miedo puede volverse emocionante cuando se sabe que al final se estará a salvo. Según el Dr. Aboujaoude, ciertas experiencias pueden dar la ilusión de que se pueden dominar las situaciones amenazadoras y sobrevivir a ellas. Enfrentar el miedo se siente como una victoria y puede ser positivo enfrentarse a lo que se teme.
Sin embargo, es importante mantener un equilibrio, ya que algunas personas pueden buscar constantemente el miedo, arriesgándose en situaciones peligrosas. La diversión aterradora, como las casas encantadas y las películas de terror, suele estar dirigida a adolescentes y jóvenes, ya que formar parte de la edad adulta implica enfrentarse a los miedos en todas las culturas.
Esta nota fue realizada con la ayuda de Inteligencia Artificial.
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