La isla de Navidad, ubicada en el océano Índico, a unas 3,5 horas de vuelo al noroeste de Perth, la capital de Australia occidental, es conocida como las "Galápagos de Australia" gracias a su impresionante belleza natural. Esta remota joya del océano se ha convertido en un paraíso multicultural, donde conviven diferentes comunidades y se hablan varios idiomas.
¿Cómo es vivir en la Isla Navidad?
Con una población de aproximadamente 1.700 residentes, la isla de Navidad es hogar de una vibrante y armoniosa comunidad. Según el censo de 2021, alrededor del 22% de los habitantes tienen ascendencia china, el 17% australiana, el 16,1% malaya, el 12,5% inglesa y el 3,8% indonesia. Esto significa que en el día a día se escuchan diversos idiomas como inglés, mandarín, malayo, cantonés, chino Min Nan y tagalo de Filipinas, entre otros.
La isla de Navidad se ha convertido en un crisol multicultural debido a su historia ligada a la minería durante la época colonial y la Segunda Guerra Mundial. En 1643, la Compañía Británica de las Indias Orientales avistó la isla por primera vez en Navidad y desde entonces lleva su nombre.
Durante la Segunda Guerra Mundial, las tropas japonesas ocuparon la isla y la mitad de la población fue enviada a campos de prisioneros en Indonesia. Después de la guerra, los isleños regresaron con sus cónyuges e hijos, lo que contribuyó aún más a la diversidad cultural de la isla.
¿Por qué se le da el nombre de Navidad a la isla?
El nombre de la isla le fue otorgado por el capitán británico William Mynors, quien llegó a la isla en 1643, el 25 de diciembre el día de Navidad.
La capital y principal ciudad de la isla, Flying Fish Cove, alberga alrededor del 80% de la población, unas 1.300 personas. Es en este lugar donde se desarrolla gran parte de la vida en la isla de Navidad. Aquí se encuentra la Escuela Secundaria del Distrito de la isla de Navidad, la única escuela de la isla, donde trabaja Lauren Taylor, una administradora escolar a tiempo parcial de 37 años. Taylor se enamoró de la isla desde el primer momento en que llegó y asegura que podría vivir allí durante muchos años.
Con sus maravillosos arrecifes de coral y rica vida marina, la isla de Navidad ofrece a sus habitantes un entorno natural único en el que disfrutan de actividades como el buceo libre, el snorkel, el submarinismo, el surf y la espeleología. Además, la isla cuenta con playas escondidas en medio de la selva, invitando a paseos y momentos de relajación.
La isla de Navidad es un verdadero tesoro para Australia, no solo por su increíble belleza natural, sino también por su diversidad cultural y la convivencia armoniosa de diferentes comunidades. Es un lugar único en el que el multiculturalismo se vive en cada rincón.
Esta nota fue realizada con la ayuda de Inteligencia Artificial.
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