¿Por qué el enrojecimiento ocular puede ser un síntoma de enfermedades más graves? Es un síntoma común que puede estar asociado con diversas causas, desde alergias e irritaciones hasta enfermedades más severas. Según la Dra. Josefina Reñones, oftalmóloga de Vithas Eurocanarias, es importante prestar atención a otros síntomas acompañantes y buscar atención médica cuando sea necesario.
Síntomas de otras enfermedades oculares acompañados de los ojos rojos
Según la experta, los ojos rojos pueden ser causados por irritación o inflamación de los vasos sanguíneos en la superficie del ojo. Esto puede deberse a alergias, infecciones virales o bacterianas, sequedad ocular, exposición a sustancias irritantes y lesiones oculares. Sin embargo, también pueden ser un indicio de enfermedades no relacionadas con los ojos, como enfermedades autoinmunes (artritis reumatoide y lupus), infecciones sinusales, resfriados, gripe y fiebre.
La hipertensión severa o la crisis hipertensiva también pueden manifestarse con ojos rojos, junto con otras señales de alerta. Es por eso que es crucial acudir al médico si se experimenta dolor intenso, sensación de cuerpo extraño en el ojo, fiebre alta, picazón severa, ardor, secreción anormal, visión doble, cambios en la visión o pérdida de visión parcial.
¿Cuál es el tratamiento y remedios naturales para tratar los ojos rojos?
En cuanto al tratamiento, la Dra. Reñones enfatiza que debe ser determinado por un médico después de un diagnóstico preciso. En el caso de alergias, se pueden recetar colirios antihistamínicos o lubricantes oculares. La conjuntivitis viral o bacteriana puede requerir colirios o ungüentos antibióticos. Para la sequedad ocular, se pueden utilizar lágrimas artificiales.
Existen algunos remedios caseros, como compresas de té de manzanilla frío, que pueden proporcionar un alivio temporal, pero no son una solución definitiva. Si el enrojecimiento ocular persiste o empeora, es recomendable buscar atención médica para un diagnóstico adecuado y un tratamiento apropiado.
La Dra. Reñones también ofrece consejos para prevenir los ojos rojos, como utilizar gafas de protección en situaciones de riesgo, descansar los ojos regularmente durante periodos prolongados de trabajo o uso de dispositivos electrónicos, parpadear con frecuencia para mantener los ojos hidratados y utilizar lágrimas artificiales en caso de sequedad ocular.
Además, es importante mantener una buena higiene ocular, lavándose las manos antes de tocarse los ojos y evitando compartir productos de maquillaje o lentes de contacto con otras personas.
Si se sospecha de una condición subyacente que pueda contribuir al enrojecimiento ocular, es fundamental seguir las indicaciones y el tratamiento recomendado por el médico para controlar y manejar adecuadamente la situación.