Según datos presentados en España por la plataforma de Educación Digital Empantallados, las personas en 2019 duraron un promedio de 11 horas diarias al frente de diversas pantallas (computadores, portátiles, celulares). En el transcurso de la pandemia y después de ella, ese porcentaje aumentó a 14 horas diarias.
Las personas son cada vez más dependientes de los teléfonos celulares, algunos han considerado que estos dispositivos móviles son casi que el instrumento desde el cual se pueden resolver todo tipo de situaciones laborales, del hogar, de esparcimiento y en general, abarca prácticamente cada una de las esferas sociales que involucran al individuo.
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Sin embargo, el daño parece ser silencioso y los efectos imperceptibles, hasta que las personas visitan a su oftalmólogo de confianza. El uso continuo de televisores, computadores de escritorio, teléfonos celulares, portátiles, va propiciando afectaciones en los ojos. A esto se le conoce como "síndrome visual informático", el cual puede generar resequedad, irritación en los ojos, visión borrosa.
¿En qué consiste la regla del 20-20-20?
Sin embargo, no todas son malas noticias. Hay consejos prácticos y muy valiosos que, según los expertos, se pueden poner en práctica para mitigar los efectos que puede generar el "síndrome visual informático".
Una buena recomendación que hacen los especialistas es seguir la regla del 20-20-20, creada por Jeffrey Anshel, oftalmólogo y propietario de una consultoría que ayuda las empresas a minimizar los problemas oculares de los empleados.
Lo que hay que hacer es muy sencillo. Cada 20 minutos la persona que permanece mucho tiempo al frente del portátil o del teléfono móvil, debe mirar hacia otra parte. Acto seguido, es necesario mirar durante 20 segundos enfocando algún objeto o punto de referencia a una distancia de 20 pasos (6 metros).
Con esto, la persona logra que sus ojos no permanezcan enfocados en distancias cortas durante tanto tiempo. El ejercicio invita a alterar esa distancia focal y a relajar los ojos cargados por la intensidad que produce el reflejo de las pantallas.
Otras recomendaciones
La distancia recomendada por los especialistas para que el computador de escritorio esté separado de los ojos es desde los 50 centímetros hasta un metro.
Sin lugar a duda, ajustar el brillo de las pantallas, también ayuda a los ojos a no sobrecargarse con el trabajo continuo y las largas jornadas a las que se exponen.
