Un reciente estudio científico publicado en la revista Plos Biology revela que la quimioterapia puede reactivar el crecimiento de células tumorales "durmientes" y contribuir a la reaparición del cáncer de mama. Investigadores internacionales han descubierto que un fármaco estándar utilizado en la quimioterapia daña las células no cancerosas circundantes, lo que puede despertar a las células tumorales latentes y promover su crecimiento, este hallazgo podría ser crucial para comprender la recurrencia del cáncer y orientar futuras investigaciones para prevenirlo y combatirlo.
Los tipos de cáncer más letales del mundo
El cáncer sigue siendo una de las principales causas de muerte en todo el mundo, cobrando más de 10 millones de vidas en el año 2022. Entre los tipos de cáncer más comunes se encuentran el de mama, pulmón, colon, recto y próstata.
La quimioterapia se ha utilizado durante años como un tratamiento para el cáncer, con el objetivo de eliminar las células cancerosas al atacar aquellas que se multiplican rápidamente en el cuerpo. Sin embargo, este nuevo estudio ha arrojado luz sobre un efecto secundario preocupante.
Fármacos contra el cáncer afectan células no contaminadas
Los investigadores llevaron a cabo experimentos tanto en modelos celulares como en ratones con cáncer de mama, administrando un fármaco quimioterapéutico ampliamente utilizado, el docetaxel, a concentraciones relevantes fisiológicamente.
Descubrieron que incluso a dosis muy bajas, el fármaco dañaba algunas células no cancerosas, mientras que las células cancerosas no se veían afectadas. Además, el tratamiento inducía la reentrada del ciclo celular en las células cancerosas, reactivando su crecimiento.
La quimioterapia promovía el crecimiento de las células
Uno de los hallazgos más destacados del estudio fue la identificación de dos moléculas clave de señalización celular, llamadas G-CSF e IL-6, que se liberaban debido al tratamiento con quimioterapia y promovían el crecimiento de las células tumorales latentes. Estas moléculas pudieron neutralizarse utilizando anticuerpos o bloqueando el mediador de las señales dentro de las propias células cancerosas, lo que inhibía su reactivación.
Aunque la quimioterapia ha logrado reducir la mortalidad en muchos tipos de cáncer, incluido el de mama, la enfermedad vuelve a aparecer en hasta un 23% de las pacientes en los primeros cinco años después del tratamiento. Esto se debe a que algunas células cancerosas entran en un estado latente durante el tratamiento y vuelven a despertar y dividirse posteriormente.
Las implicaciones de este estudio en los tratamientos contra el cáncer
Los resultados de este estudio tienen implicaciones importantes, ya que destacan la importancia de las células circundantes y no solo de las células cancerosas en sí para determinar la respuesta a la quimioterapia. Sin embargo, los investigadores señalan que aún se necesita más investigación y que la traducción clínica de estos hallazgos sigue siendo un interrogante.
Joan Albanell, jefe del Departamento de Oncología Médica del Hospital del Mar de Barcelona, valora que este estudio describe los mecanismos responsables de la reaparición del cáncer de mama y ofrece posibles enfoques farmacológicos para contrarrestarlo. Por otro lado, Javier Cortés, director del Centro Internacional de Cáncer de Mama de Barcelona, indica que el balance final absoluto puede resultar positivo, ya que el cáncer es un conjunto complejo donde las interacciones pueden ser negativas en una parte y positivas en otra.
Este hallazgo científico ofrece nuevas perspectivas en la lucha contra el cáncer de mama y plantea posibilidades de investigación en el desarrollo de tratamientos más efectivos y enfocados en prevenir la recurrencia de la enfermedad.
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