El pasado 12 de febrero se vivió uno de los mejores momentos para la carrera profesional de Rihanna, quien lleva un poco más de diez años en la industria musical, destacándose por ser una exitosa cantante pop; sin embargo, en los últimos tiempos, ha estado alejada de los escenarios, ya que es creadora de una de las marcas de belleza con mayor auge en la actualidad: 'Fenty Beauty'.
El show de Rihanna en el Super Bowl trajo sorpresas
Como se venía comentando, el "performance" de Rihanna tenía altas expectativas, teniendo en cuenta que la artista no pisaba un escenario desde hace siete años. El show en sí causó amores y odios, pues mientras unos creyeron que estuvo espectacular, otros mantienen la idea de que le faltó actitud y presencia a la oriunda de Barbados.
Además, el aspecto físico de "Riri" generó intriga, ya que se generó debate en redes sociales si se encontraba en sobrepeso, o, embarazada. Al concluir el concierto, uno de sus representantes confirmó para medios internacionales que, efectivamente, la intérprete de 'Pon de replay' estaba a la espera de su segundo hijo.
Tan grandes fueron las reacciones, que el expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, comentó lo siguiente en internet:
FALLA ÉPICA: Rihanna dio, sin lugar a dudas, el peor espectáculo de medio tiempo en la historia del Super Bowl. Esto después de insultar a mucho más de la mitad de nuestra nación, que ya está en grave DECLIVE, con su lenguaje obsceno e insultante. Además, demasiado de su ¡estilista!
La intérprete de señas del Super Bowl
Además del show de medio tiempo, orquestado por Rihanna, un personaje fue vital en la transmisión del mismo. Se trata de Justina Miles, una intérprete de señas, quien es famosa en plataformas como TikTok.
Lo que llamó la atención es que mientras hacía su labor, bailaba y se gozaba las canciones de la artista; tal fue la repercusión de su acción, que muchos catalogaron mejor su actitud que la de la misma Rihanna.
Es la primera vez que el Super Bowl adopta esta medida, pues nunca se había tenido en cuenta a la población con discapacidad auditiva.