La fama no es fácil de manejar, es claro, pero, ¿Cuántos no desearían tener un poco de ella?, que caminando por la calle te pidan autógrafos o que los fans no te dejen ni caminar. Unos supieron aprovecharla y se mantienen vigentes, ya sea como músicos, empresarios o actores. A otros, sin embargo, les ha pegado duro y han vuelto su vida en todo un escándalo mediático.
De cualquier manera, aquí te contamos la vida de los artistas antes de la fama; arrancamos este especial con una las estrellas más brillantes de la música y de los Estados Unidos: Madonna.
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Madonna es el nombre artístico de la reina del pop, pero, ¿sabías que su verdadero nombre es Louise Verónica Ciccone, que tiene 62 años y que nació en Bay City, Michigan?
Antes de descrestar al público con su puesta en escena en cada concierto, su sensualidad, su belleza, sus bailes, sus resonados romances, Madonna fue una mujer común y corriente que luchó desde abajo para alcanzar el éxito en la música. Sus padres, Silvio Anthony Ciccone y Madonna Louis Fortin, son inmigrantes italianos que, como muchos otros, llegaron a Estados Unidos desde Europa buscando mejorar su calidad de vida.
Al pisar suelo estadounidense, el padre de Madonna consiguió trabajo como ingeniero en General Motors y Chrysler; la madre de la artista, por su parte, murió cuando ella tenía solo 6 años a causa de un cáncer de mama, así que él debió asumir su cuidado en la humilde vivienda que tenía en los suburbios de Detroit.
Madonna de niña asistió a escuelas católicas donde, sin saber, fue despertando su gusto por la música. Posteriormente, al terminar sus estudios de enseñanza media obtuvo una beca para estudiar en la Escuela de Danza, Teatro y Música de la Universidad de Michigan, y fue allí donde tomó una decisión que cambiaría para siempre su vida.
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