Nacida en el seno de una familia de músicos, su madre era cantante de gospel, asimismo, su madrina era nada mas ni nada menos que Aretha Franklin. Desde pequeña comenzó a cantar en los coros de la iglesia, donde se destacaba por su espectacular voz.
En 1983, Clive Davis la descubrió en una discoteca de Nueva York, y la contrató de inmediato.
Después de su éxito en el álbum denominado “Whitney Houston”, donde se destacaron temas como 'How Will I Know', 'Saving All My Love For You', 'I Wanna Dance With Somebody' y 'The Greatest Love Of All', su carrera comenzó a ascender paulatinamente.
Dos de los momentos cumbre de su trayectoria fue la actuación en el Super Bowl, en la edición del año 1991 con ‘The Star Spangled Banner’; cabe aclarar que en esos tiempos Estados Unidos se encontraba en disputa con el Golfo Pérsico. Tal fue el impacto de la interpretación de Houston que la audiencia arrojó 79 millones de televidentes.
Como podemos olvidar ‘Will Always Love You’, la icónica canción de la película ‘El Guardaespaldas’, de la cual Houston no solo fue la intérprete del tema principal, sino protagonista del filme, marcando su debut actoral en compañía de Kevin Costner.
Este tema fue tan famoso, que marcó el inicio de una estupenda carrera, donde su majestuosa vez y su evidente belleza la hacían única.
No obstante, los problemas se avecinaron en la vida de la artista cuando comenzó una relación sentimental con Bobby Brown, un rebelde cantante de R&B, con quien se casó en 1992. Los rumores de fiestas pesadas y consumo de drogas no se hicieron esperar; con referencia a esto, la carrera de Whitney se vino ‘a pique’.
Desde el inicio del matrimonio, dejó de vender la cantidad de discos a la que estaba acostumbrada, asimismo, según los fanáticos su voz no sonaba igual; por supuesto, el desgaste físico por el consumo de sustancias alucinógenas era evidente.
Con el paso de los años, se dio a conocer que entró a rehabilitación dos veces. En el 2010, la artista confesó en una entrevista para Ellen DeGeneres que estaba limpia.
Lastimosamente, el 11 de febrero del 2012 su guardaespaldas la encontró muerte en una bañera de un hotel en Beverly Hills, donde asistiría a una gala que presentaría su mentor Clive Davis. La cantante tenía 48 años.
Y la tragedia no para aquí: tres años después, su única hija, Bobby Kristina Brown, falleció a los 19 años por presunto abuso de sustancias. Esta permaneció seis meses en coma.