Mientras las estrellas del reguetón como Karol G y Bad Bunny conquistan el mundo, hay un rincón donde su música no resuena con la misma fuerza, Brasil, y es que aunque ambos artistas tienen seguidores en este país sudamericano, no gozan del mismo protagonismo que en otras latitudes. La pregunta que surge es evidente: ¿por qué dos de los íconos más grandes del género no logran conquistar el oído brasileño?
Por qué Karol G y Bad Bunny no conquistan Brasil
Al respecto, Joan Royo Gual, un periodista que ha explorado esta paradoja, señala que Brasil es una "isla" musical en Latinoamérica y aunque el español podría ser un obstáculo lingüístico, hay otra razón más en juego. La rica diversidad musical brasileña, desde el sertanejo hasta la bossa nova, ha creado una escena donde los géneros locales prevalecen sobre las tendencias internacionales.
El sertanejo, un género musical brasileño que toca temas como infidelidades y desamores, ha ganado prominencia en Brasil. Con raíces en la música caipira, este estilo rural ha eclipsado, en parte, la efervescencia del reguetón. Aunque Maluma y J Balvin tuvieron cierto éxito, su popularidad se desvaneció después de colaborar con Anitta, la estrella nacional brasileña.
Brasil se destaca por su profunda cultura musical, que va más allá de las tendencias globales. Con géneros como la bossa nova, el frevo, la samba y el rock brasileño, los brasileños no solo siguen modas, sino que también exploran sonidos regionales y rurales. Esta diversidad musical contribuye a una narrativa compartida que excluye, en gran medida, la influencia de los países hispanohablantes.
Karol G y Bad Bunny no llevaron sus giras a Brasil
A pesar de la "era dorada" del reguetón, Brasil ha resistido el impacto de este género. Incluso Bad Bunny, en su gira mundial, evitó presentarse en Brasil debido a la falta de demanda. Karol G, la sensación latina del momento, programó un único concierto en São Paulo para mayo de 2024, en una sala con capacidad para 8,000 personas, en comparación con la aclamada Ivete Sangalo, que llenó el estadio de Maracaná para celebrar sus 30 años de carrera.
A pesar de liderar las listas en otros lugares, Karol G y Bad Bunny enfrentan un desafío en Brasil, donde la rica y variada escena musical local sigue siendo la preferida. La barrera del idioma, la diversidad musical y una audiencia enfocada en sus propias estrellas son factores que hacen que el reguetón no sea tan dominante en la tierra de la samba y la bossa nova. Aunque Brasil no ha sucumbido completamente a la fiebre del reguetón, los artistas latinos siguen explorando cómo conquistar un país que, musicalmente hablando, marcha al ritmo de su propia melodía.
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