El actor de 51 años ha elegido un destino muy particular para celebrar la vida de su actual pareja, Bronislava Gregušová, también conocida como Boni Gregus y quien fue finalista del concurso de belleza Miss Eslovaquia en 2015. Ahora, ad portas de los 31 años de la modelo y bailarina europea, decidieron pasar la fecha en su natal Eslovaquia.
El actor compartió en redes sociales diferentes fotografías, donde se le ve contento por el viaje y la experiencia de interactuar con la nieve. Él, siendo un cubano oriundo de La Habana, encontró la nieve como un regalo especial que pudo compartir gracias a la compañía de su pareja, a quien pidió matrimonio durante un viaje a las Cataratas de Iguazú en 2019.
Ella, por su parte, siempre se muestra muy feliz y enamorada. Y no solo del actor cubano, sino también de la hija fruto de aquella relación, la pequeña Briana. Ahora, sobre sus 31 años, celebra el primer aniversario como madre y también tres años de matrimonio con el hombre que se robó su corazón durante "Baila conmigo Paraguay", el concurso donde ambas celebridades se conocerían y se enamorarían.
Mario Cimarro en la actuación
El cubano emigró de La Habana a México en 1994. Allí logró consolidarse como actor y entrar en los castings de novelas locales. Sin embargo, fue hasta 2002 que los Estados Unidos le dieron cabida como protagonista de la famosa novela Gata Salvaje, la cual le daría el suficiente reconocimiento como para ser el rostro principal de otras producciones, que tendrían visibilidad en todo el contenido americano.
En total ha hecho 15 novelas, la mayoría de ellas mexicanas, ha sido jurado de tres programas, ha participado en siete películas, ha participado de tres obras de teatro e incluso hizo parte del lanzamiento de un álbum musical. Siempre apasionado, En 1998 conoció a la actriz Natalia Streignard en la telenovela La mujer de mi vida. Se enamoró de ella, le pidió matrimonio, pero finalmente se separó en 2006.
Actualmente, Cimarro sigue en la actuación, pero ensimismado en su faceta de padre y esposo. Aunque le lleva una diferencia considerable de años a la joven Broni, tal parece que son el tipo de pareja que demuestra que el amor no conoce de distancias, diferencias culturales y menos de décadas de diferencia.