Marcela Reyes se sinceró con los más de 2.5 millones de seguidores que ella tiene en sus redes sociales y decidió revelar algunas imágenes de momentos más felices y más duros de su vida, es así que, aprovechando los famosos TBT, en sus historias publicó algunos fotos y videos que sorprendieron a sus fans.
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La DJ, comenzó mostrando un tierno video en el que ella aparece amantado a su hijo, Valentino, cuando estaba recién nacido, aunque confeso que a ella casi no le salió leche materna así que tuvo que alternarla también con tetero. Más adelante mostró un tierno video de su hijo y su perro cuando ambos estaban muy pequeños juntos, para demostrar que han crecido juntos.
Una imagen impactante
Pero luego llegó el momento de mostrar un impactante video en el que ella aparece de pie, utilizando un pañal y ensayando en una consola revelando que mientras ella se recuperaba de una cesárea y una cirugía de biopolímeros, ella aprendía a tocar y ensayaba día y noche.
“Lo que nadie sabe es que mientras me recuperaba de una cesárea y una grave cirugía de biopolímeros, aprendía a tocar y ensayaba día y noche sin descanso”, escribió al publicar la fotografía.
Aunque, luego Marcela agradeció, todo lo que ha pasado y ha sacrificado porque gracias a ello tiene el éxito que tienen hoy en día.
Una decisión de la que Marcela Reyes se arrepiente
Marcela Reyes publicó otras fotos, en las que ella aparece embarazada y trabajando en una pasarela por varias ciudades, además se muestra también en la camilla de un hospital minutos después de dar a luz, se ve una foto de su mamá, cuidando a su nieto y otras fotos de su hijo y amigos.
Pero, luego Marcela sorprendió publicando una impactante foto en la que se ven sus glúteos muy maltratados y con vendaje, efecto de las consecuencias de los biopolímeros, sin embargo, eso no impidió que, pese a que fue intervenida tres veces, ella dejara de trabajar, como lo mostró en un video donde ella muestra su outfit listo para ir a un evento, aunque nuevamente se mostró muy arrepentida de haberse inyectado esa sustancia.
“Sin duda alguna la peor decisión de mi vida fue dejarme inyectar la cola de biopolímeros, no sabía la verdad de lo que me ponían”, escribió Marcela Reyes.
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