Muchas de las personalidades colombianas tienen miles de seguidores que los ven como ejemplo de lo que ellos quisieran ser o tener en la vida. Sara Uribe muchas veces se convierte en ese ejemplo de mujer para muchas, que la ven saliendo adelante con su hijo.
Al mismo tiempo, la presentadora, que se muestra sin filtros y dice las cosas como piensa, ha hecho que su comunidad la vea también como esa mujer echada para delante y sin miedo a los retos o a las ausencias, incluso en el amor.
Pero lo que también admiran de Sara es que ella se ha querido en todas sus facetas y por eso creen que no le pasa nada malo y que siempre tiene la mejor actitud, ante todo, pero el tema del cuerpo, por ejemplo, es un tema complejo para ella que ha ido superando.
La dinámica de Sara Uribe que la hizo revelar dura parte de su vida
En redes sociales la influenciadora hizo una dinámica de preguntas con sus miles de seguidores y entre esas estuvo quienes le preguntaron cómo hace para cuidarse, cómo recuperó su cuerpo después del parto y quienes le preguntan cómo hacen para tener más amor propio.
Ella no dudó en responderlo, sobre todo desde su realidad, desde esos momentos que ha vivido como mujer y que ha tenido que enfrentarlos, pero también dejar ver que, aunque siempre haya momentos complicados, el sol sale para todos.
El dolor que casi le cuesta la vida a Sara Uribe
Muchas le preguntaron sobre esa cicatriz que deja la cesárea y que las hace sentir incómodas, e incluso no se sienten atractivas para estar en la intimidad. Aunque ella reveló que su parto fue natural, Sara Uribe tiene una cicatriz en esa misma zona que le duele en el alma.
En los videos e imágenes que decidió mostrar para que vean que no está tan alejada a esa realidad que muchas de sus seguidoras viven, Sara Uribe mostró la cicatriz, pero también relató que en ese momento un dolor muy fuerte que no la dejaba respirar la persiguió.
Que sentí fuego en su parte superior del pecho, que no podía dormir y estar tranquila, y que todo eso pasó cuando su hijo estaba muy pequeño. Ella decidió intervenirse porque le dijeron que tenía una hernia.
Pero luego de hacerlo el dolor seguía y no pudo hacer mucho. Decidió incluso intervenir la parte superior de su pecho más de una vez y nada, y esto le cargó de inseguridades.
Sara Uribe reveló que no podía estar con un hombre, le daba pena su cuerpo, y hasta que se negaba a hacer fotos de ropa interna para mujeres porque no se sentía bien, no se amaba como estaba y con esa herida para siempre.
Pero dejó saber que el tiempo pasó, que ella se fue recuperando, que le dejó mucha de sus cargas a Dios y que ahora es feliz, se ha enamorado, ha estado entregada en cuerpo y alma a un hombre y sobre todo ha vuelto a ser quien siempre ha amado a ser. Fue largo el camino, pero lo logró.
