Michelle no solo conoció al papá de Rigo de la mejor manera, sino que no dudó en apoyarlo en su emprendimiento, de las rifas y le compró un número, pero como de ese tema no sabe mucho, le pidió ayuda a Rigo.
Él le dice que sin duda el número ganador es el 26, la fecha de su cumpleaños y ella lo acepta. Pero lo que no se imaginó jamás era que iba a ganar con ese número una arrocera.
Rigo tampoco lo esperaba, por eso su papá no dudó en irle a contar que el gran amor de su vida había ganado y que justamente su tío estaba por salir a Medellín a llevar a un grupo de personas.
Rigo llegó a Medellín con arrocera en mano para Michelle
Y así lo hizo. No dejó que el tiempo pasara para irse con su tío a verla, parqueó la chiva en la que recorrió de Urrao a Medellín en el frente de su lujosa casa y la sorprendió.
Le entregó el premio, hablaron, ella le hizo un recorrido por la casa y hasta le pidió aprender a bailar salsa. Fue un día especial para Rigo porque dejó ver que sin duda todo lo que estaba haciendo por Michelle estaba valiendo la pena.
Los consejos del tío nunca fallan
Pero no todo es color de rosa, pues Rigo no podría viajar todo el tiempo hasta Medellín, y tampoco tiene todo lo que él siente que a Michelle le hace falta para ser feliz, por eso su tío le deja claro varias cosas.
Le hace saber que no hay nada mejor que tener novia en el pueblo, de donde es uno, sobre todo ‘porque de esa forma puede verla, estar cerca y de verdad tener una relación, pero Rigo le deja saber a su tío, que no, no hay nada, que solo está hablando con Michelle, pero sin nada concreto hasta ahora.
Todos saben que Rigo se muere de amor por Michelle que no quiere perderla, pero también se sabe que Rigo no podría darle todo lo que ella está acostumbrada. ¿Pondrá más el amor que el dinero en este amor?
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