El capítulo de Rigo de este martes 7 de noviembre, estuvo cargado de muchas emociones, incluyendo una bella conversación de Rigo con su papá, Don Rigoberto (Robinson Díaz) reviviendo el viaje que hicieron en familia a Santa Marta y la promesa de que iban a hacer el mismo viaje, por cuenta de Rigo (Juan Pablo Urrego).
Rigo continúa con su arduo entrenamiento
Pero, también vimos un momento divertido protagonizado por Rigo y Carmelo (Emmanuel Restrepo), pues en medio del entrenamiento con el equipo, patrocinado por Helados Toné, los entrenadores le dijeron a Rigo que podía irse para su casa y él, emprendió su camino en bicicleta sin saber la sorpresa que se iba a encontrar en el camino.
Y es que luego de que Carmelo le dijo a Evaristo que había recorrido bastantes kilómetros en su primer entrenamiento, el mismo Evaristo, en su carro, decidió acompañar a su hijo, para cerciorarse de que estuviera entrenando bien, pero el rendimiento de Carmelo fue muy flojo, por eso lo comenzó a presionar, para que siguiera pedaleando, algo que generó una pequeña discusión.
En ese instante, Rigo alcanzó a Carmelo y riéndose por lo despacio que iba, le dijo “Linda cicla”, a lo que él respondió revelando que su papá se la había regalado, luego de eso Rigo respondió que lástima que él tuviera una cicla tan buena pero que él no lo fuera tanto y luego Rigo siguió su camino.
“Lástima la diferencia entre la cicla y el ciclista, es como gastar pólvora en gallinazos, toca es cómo ponerlo a manejar la chiva del tío mío (…) por qué no cambia el carro de acompañante por una ambulancia, por si le da asma vial”, dijo Rigoberto Urán antes de acelerar.
El humillante momento de Carmelo
Estos comentarios hicieron que Evaristo se enojara un poco con su hijo y le exigiera que él acelerara y alcanzara a Rigoberto Urán, para hacerse respetar y se le ocurrió la idea de empujarlo un poco por una bajada y Carmelo perdió el control de la bicicleta y se desvió del camino, estrellándose de frente con una cerca de madera y cayendo justo entre el estiércol de los animales
Este humillante momento, que culminó con un regaño que le dio Evaristo a su hijo y tras ver como había quedado prefirió dejarlo tirado en el lugar, sin duda sacó las risas de los televidentes, que calificaron el momento como una pequeña lección de humildad.
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