Desde acusarlos de mentir hasta denunciar una "guerra contra Meghan", el príncipe Enrique y su esposa, la exactriz estadounidense Meghan Markle suben el tono contra la familia real británica en la esperada segunda y última entrega de su documental a manos de la gigante del streaming Netflix este jueves 15 de diciembre.
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Tras el éxito de los tres primeros episodios, en los que los duques de Sussex arremetieron principalmente contra la prensa sensacionalista británica por su trato a la exactriz mestiza, la pareja parece apuntar ahora al Palacio de Buckingham y al príncipe Guillermo, heredero al trono y hermano mayor de Enrique, para justificar su sorprendente e inesperada salida de la monarquía en 2020.
Recordemos que en dos nuevos tráilers publicados en los últimos días a través de las redes sociales de Netflix, se puede ver a Meghan diciendo: "No sólo me echaron a los lobos, me utilizaron para alimentar a los lobos".
De hecho, su abogada Jenny Afia insiste en este punto, diciendo que "había una verdadera guerra contra Meghan" y que vio "pruebas de que hubo informaciones procedentes del palacio contra Enrique y Meghan en beneficio de otras personas".
"Les parece normal mentir para proteger a mi hermano, pero no estaban dispuestos a decir la verdad para protegernos a nosotros", asegura el príncipe refiriéndose a Guillermo, de 40 años, en este nuevo adelanto que ya podrás ver en la plataforma.
El duque de Sussex, de 38 años, que publicará su libro de memorias "Spare" (Recambio) en enero del 2023, también se graba a sí mismo con su teléfono móvil mientras abandona el Reino Unido y denuncia el "robo de la libertad".
¿Cómo ha reaccionado el Palacio de Buckingham?
Lo cierto es que estos nuevos episodios pueden resultar explosivos para la realeza, en un periodo crucial tres meses después de la muerte de Isabel II y la llegada al trono de Carlos III. De momento, el palacio no ha hecho ningún comentario sobre el contenido del documental.
Pero si las acusaciones vertidas en la última parte son serias, Buckingham podría verse obligado a romper su silencio esta vez.