Los días de desesperación para Lucía no acabarán, pues ahora otra noticia con respecto a su fallida relación con Sebastián Vallejo, podría alterar el futuro de sus bienes.
Además, Lucía no dejará que se realicen los tramites de la anulación y así peleará a capa y espada para que se elimine la diligencia de la anulación de matrimonio.
Por una parte, Gaviota tendrá que afrontar una difícil situación luego de haber tomado la decisión de separarse de Sebastián por una mentira de Iván.
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Por eso, Gaviota empezará a buscar trabajo en diferentes empresas, y una de ellas le abrirá la puerta; sin embargo, el jefe le pedirá los datos de la anterior empresa y del anterior jefe.
Por supuesto, Gaviota reaccionará aturdida y decepcionada, pues el objetivo de ella era que Sebastián no supiera nunca más de lo que pasa en su vida.
La fuerte decisión que tomará Lucía
Una pena de amor se ahoga en el vino y sentada en un sillón, pero esta vez para Lucía refugiarse en dolor no será una opción y tomará una decisión que comprometerá su futuro.
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Lucía se dirigirá al médico y le confesará que está decidida a hacerse la fertilización y concebir un hijo.
Cabe reconocer que, para Lucía tener un hijo siempre ha sido un objetivo, y para cumplir ese sueño, ella decidirá tomar el control y tener a su hijo por otro método.